Administrador de Tareas de Windows y Linux

Administrador de Tareas de Windows

El administrador de tareas es un pequeño programa que viene incorporado en Windows, proporciona información sobre los programas y procesos que se ejecutan en el equipo. También proporciona los indicadores de rendimiento más utilizados por el equipo.

El administrador de tareas se puede utilizar para supervisar el rendimiento de su ordenador, en él se puede ver el estado de los programas que se ejecutan y finalizan a los programas cuando no responden. También se puede utilizar gráficos y datos sobre la CPU y ver el uso de la memoria.

Se puede abrir el administrador de tareas al hacer clic con el botón secundario del mouse en una zona en blanco de la barra de tareas o también al presionar las teclas ctrl+alt+supr simultáneamente.

El administrador de tareas consta de varios componentes.

• El menú en la parte superior.
• Las diferentes pestañas: aplicaciones, procesos, rendimiento, redes y usuarios.

Cada pestaña describe exactamente lo que es su función:

Aplicaciones: esta muestra, que programas se está ejecutando actualmente en su equipo. Detrás del nombre del programa esta su estado. Algunas aplicaciones que permiten abrirse varias veces, aparecen como varias tareas.

En la columna de estado se ve el estado de la tarea, si funciona correctamente su estado será activo, pero si un programa falla, leerá el mensaje “no responde” en ese caso se puede seleccionar el programa que está colgado haciendo clic con el ratón y luego finalizar tarea, con esto el programa se detendrá y finalizará.

Si no cierre el programa puede suceder que el programa que se está ejecutando pueda consumir muchos recursos.

Procesos: esta muestra todas las aplicaciones que se están ejecutando actualmente en el equipo, alguno de ellos tiene nombre que no se pueden identificar rápidamente. Si el equipo responde con lentitud, se puede ver en esta lista de tareas la memoria sobrecargada.

Servicios: encontramos los servicios disponibles en el sistema, de modo similar ha como se muestran los procesos. Un usuario avanzado podrá desde aquí iniciar o detener un servicio si alguna vez le es necesario.

Rendimiento: ofrece una visión del proceso en el equipo. Muestra los gráficos con el uso del CPU y su historial.

Función de Red: esta muestra las funciones de red se puede observar un gráfico que muestra el uso de la red.

Administrador de Tareas de Linux

HTOP es una aplicación que nos muestra los procesos y nos permite gestionarlos. También nos enseña el estado de la memoria, la swap y el consumo de CPU. El análogo gráfico es el “monitor de sistema” en las opciones gráficas de Linux y en Windows el equivalente sería el “Administrador de Tareas”.

Agregar, eliminar y administrar de usuarios: algo básico, decidiendo en que máquinas crear los usuarios, sobre que directorios tienen permiso, etc.

Agregar y eliminar hardware: aunque los servidores son sistemas bastantes estables y compactos en cuanto a componentes (se suele cambiar el servidor no piezas sueltas) siempre hay que instalar alguna impresora, sistema NAS, etc.

Función de Red: esta muestra las funciones de red se puede observar un gráfico que muestra el uso de la red.

Hacer copias de seguridad: sin duda una de las labores esenciales en cualquier sistema de información. Afortunadamente, hoy en día, es un proceso muy automatizado y una simple verificación, debería bastar para controlar el proceso.

Instalar y actualizar software: hay que probar los programas, configurarlos correctamente, informar a los usuarios de su utilización, solucionarles dudas.

Monitorizar el sistema: organizar un buen sistema de logs es algo esencial para controlar agujeros de seguridad, errores en las aplicaciones o fallos en algunos procesos.

Función de Red: esta muestra las funciones de red se puede observar un gráfico que muestra el uso de la red.

Localización de problemas: sin duda algunas tareas más tediosas. Se deben localizar errores en los sistemas y solucionarlos o comunicárselos al servicio adecuado.

Mantenimiento de la documentación: cuando los sistemas crecen se hace necesario documentar los procesos, tanto de los sistemas como de las tareas.

Seguridad: el administrador del sistema es el encargado de definir una política de seguridad y vigilar para que los usuarios la sigan a rajatabla. De la misma forma es el encargado de auditar y probar las medidas de seguridad impuesta para comprobar su validez.

Ayudar a los usuarios: es algo a lo que cualquier informático (sea o no administrador) está acostumbrado. Y eso que a los usuarios les puede seguir cualquier problema.